L’extrarradi: Kiko Amat en Estralls (SER Catalunya)

Me gusta esta charla. Me gustan los de Estragos. Y encima son de Ripollet (visualizar arcano sistema de choque de manos entre ellos y los del Llobregat). Yo, entre brote y brote de criptotourette, digo algunas cosas de cierto calado.

Por lo general siento una inequívoca náusea al verme en videos, y tengo que apagarlos mucho antes de que terminen, abrumado por el despliegue de incomodidad física y hormigas-en-el-trasero, pero este lo pude ver hasta el final. Las preguntas ayudaron.

Por favor editores ignoren la inapropiada camiseta de flagrante promo de libro anterior en otra editorial. Juro que fue p*** casualidad.

La canción del viernes #50: DELIRIUM TREMENS I have no money

Mi puta canción del verano. Del formidable album Hiru aeroplano (Oihuka 1990). Los Delirium son uno de mis grupos favoritos de la península. Sus dos elepés son esenciales. Afterpunk clashista y frío y violento y británico y emocional y norteño a matar: lo mío, y encima en Euskera.

Escuché en repeat esta canción camino de mi presentación de Antes del huracán en Gijón el pasado julio, y ya la dejé puesta para el resto de las vacaciones. El «ay ay ay ay» me pone la piel de gallina, igual que los coros bélicos del final. Hitazo en mi casa.

Ah, aquí pueden verles haciendo el «Boga boga», del Ikusi eta ikasi (1989), en una de las pocas apariciones televisivas de la banda. Nadie sonaba así en 1990. Y aquí en versión con orquesta gigantesca (muy alucinante).

ROGER DALTREY: «Siempre me han irritado las modas del rock»

Mi entrevista exclusiva con Roger Daltrey, cantante de The Who. Mi labio superior, si quieren saberlo, se mantuvo firme durante toda la charla. Léanla en El Periódico de Catalunya, en este link.

Kiko Amat entrevista a CHRIS OFFUTT

Uno de mis autores favoritos de los últimos años. Muy fan de Kentucky seco (Sajalín) y Mi padre el pornógrafo (Malas Tierras). Lean mi entrevista para El Periódico de Catalunya aquí.

Obituario inés Bayo (Los Fresones Rebeldes)

Este es el obituario que escribí para Inés, una vieja amiga. No hace falta decir que desearía no haber tenido que escribirlo.

Fue el primero que se escribió y publicó aquel día de mierda, paciente cero de todos los que (citando la fuente o no) aparecieron luego.