Oh, sí: el lado cómico del nacionalsocialismo. Aquí tienen un mordaz pasquín motivacional basado en 11 pifias históricas del Führer de las Alemanias, que hemos escrito y publicado hace muy poco en Jot Down, y que divierte y entretiene una cosa bárbara. Se habla de apetitos narcóticos, de las grisáceas nalgas del Líder del Reich, de lo LOQUÍSIMO que estaba Goering, de la grotesca jeta de Hitler Senior (me autocito: «una cara de puerco airado más cómicamente exagerada que el bulldog de Tom y Jerry tras haberse sentado sobre sus propios colgajos»), y todo rematado con un aluvión de sus favoritas hipérboles desquiciadas y afirmaciones insensatas, queridos fans.
El texto culmina con estas palabras, profundotas y graves cual insondable sima oceánica: «Hitler se tomaba a sí mismo muy en serio (signo inconfundible de los imbéciles de espíritu) y estaba convencido que su destino era salvarnos. Exterminándonos un montón, eso sí, si éramos judíos, gays, anarquistas, socialistas, socialdemócratas, mods o rockers, morenos con el cabello acaracolado y nariz aguileña, usuarios de aceite de oliva, reparadores de acordeones con tendencia a la bizquera, fans zurdos del waterpolo, funambulistas palentinos, miembros del foro Club Rubik Catalunya y, resumiendo, TODO EL MUNDO QUE NO FUESE ÉL.»