J Church eran uno de mis grupos favoritos de pop-punk DIY de los 90, escena Lookout! y todo eso. Escuché este disco seis millones de veces en cierto piso ratonero de Cricklewood cuando acababa de salir, a lo largo de 1995/96, y me lo sé de pé a pá.
Lance Hahn (fallecido en el 2007) era uno de los grandes letristas del punk rock: irónico, verboso (cuando procedía), hábil con el estribillo memorable, referencioso sin empalagar. Además J Church eran éticamente intachables, uno de los grupos que se tomó el HUM (Hágalo Usted Mismo) con fervor milenarista.
Arbor vitae (1995), Quetzalcoatl (1993) y la colección de singles Nostalgic for Nothing (1995, también me lo compré ese año) me pirran.